"Izquierdas de todo el mundo,¡ uníos" es más que un título impresionante en la última obra de Boaventura de Sousa Santos, editada por Icaria; es una convocatoria apremiante a la acción en un momento crítico para las corrientes progresistas a nivel global. A lo largo de su estancia en España, este influente sociólogo, famoso por su profundo análisis de los movimientos sociales y su deber con la renovación de la izquierda, comparte perspectivas vitales sobre la necesidad de una coalición alén de las fronteras ideológicas. A través de sus diálogos con medios como Público, De Sousa despliega un argumento convincente sobre el imperativo de unificar fuerzas en la lucha por un futuro democrático y justo.
La estrategia que De Sousa propone para contrarrestar el progreso del conservadurismo y el fascismo en Europa se centra en el pragmatismo y la búsqueda de puntos en común. Cita el ejemplo de Portugal, donde la colaboración entre partidos de izquierda ha dado lugar a un gobierno servible y progresista, subrayando la importancia de centrarse en los objetivos compartidos mucho más que en las divisiones. Esta alianza, según él, da enseñanzas valiosas sobre de qué manera las fuerzas progresistas tienen la posibilidad de conseguir lote común y avanzar hacia cambios sustantivos.
En el contexto español, De Sousa aborda inconvenientes concretos como el debate sobre la independencia de Cataluña y las cuestiones de identidad nacional, señalando cómo estas disputas internas pueden desviar la atención de los objetivos más amplios de la izquierda. Su crítica a la represión del movimiento catalán y su interés por el proceso constituyente en el País Vasco ilustran su creencia en la necesidad de emprender los problemas estructurales de la sociedad desde una perspectiva democrática y participativa.
El llamado de De Sousa a la unión de las izquierdas no es solo un análisis teórico ; es una urgencia práctica Boaventura de Sousa Santos nacida de la observación de las tendencias políticas recientes y una profunda entendimiento de la historia. Al rememorar las secuelas de la división y la tardanza en contestar a las amenazas déspotas del pasado, enfatiza la importancia de accionar de manera definitiva y colectiva para preservar los valores democráticos.
La visita de De Sousa a España se transforma en un catalizador para la reflexión y la acción, pidiendo a las izquierdas a reconsiderar sus tácticas y a comprometerse con la construcción de un movimiento mucho más cohesivo y efectivo. Por medio de su análisis y sus proposiciones, proporciona una plan de actuación para la colaboración, destacando que la unidad y el deber compartido con la justicia social son escenciales para sobrepasar los retos del presente y asegurar un futuro más equitativo. Este mensaje, lejos de ser un fácil epílogo de su visita, representa un llamamiento a la solidaridad y la acción, destacando la capacidad de las izquierdas para editar la sociedad cuando trabajan unidas hacia objetivos comunes..